Sal que no te quieres limpiar.




Aire del Sur para no olvidar, que pase, que venga, de ese que cala hasta los huesos.
Sal que no te quieres limpiar.

Calendarios para quemar. Siestas para no pensar.
Relojes obligados a parar.

Que aquí nada es eterno...

Las preguntas, los matices, el murmullo de ojalás.
Lluvia del Norte para olvidar y volver a empezar.

Charlas que se alargan, mapas para perdernos y podernos encontrar.
Por fin puedo saber a dónde quieres llegar, casi casi hasta el final donde nadie da consejos.
Fronteras que siempre quiero cruzar,

93 días y 500 noches.
Ha empezado la cuenta atrás.

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